¡El mundo es cada día más estresante! Una estadística de Google N-Gram ilustra cómo los humanos se han visto más afectados por el estrés en los últimos 200 años:
La línea azul muestra la frecuencia con la que aparece el término “estrés” en el idioma inglés, mientras que la línea roja muestra la palabra “relajación”. El mayor aumento en el “estrés” se produjo entre 1970 y 1980, cuando la revolución tecnológica masificó el uso de los computadores y la vida se “aceleró” significativamente. Mientras tanto, la seguridad laboral disminuyó.
Pero, ¿esta es la razón por la que el estrés se ha vuelto tan prominente en la sociedad moderna?
El escritor Alain de Botton sugiere que un gran porcentaje de la ansiedad moderna es generada por la libertad y la igualdad de oportunidades, que son los principios filosóficos de las sociedades occidentales modernas: trabaja duro y tendrás éxito. La realidad, según de Botton, es algo diferente; las estructuras tradicionales siguen desempeñando un papel determinante en nuestra posición en la sociedad. La ansiedad y el estrés crecen en la brecha que existe entre el grado de oportunidad que nos muestran y las realidades que enfrentamos.
Entonces, ¿cómo puedes manejar el estrés y mejorar tus perspectivas profesionales?
Creemos que el proceso de aprendizaje de un idioma puede ayudarte significativamente a controlar el estrés, al tiempo que te da más oportunidades de tener éxito profesionalmente. En primer lugar, porque los conocimientos lingüísticos son una de las cualidades más apreciadas en el mercado laboral, y en segundo lugar, porque las habilidades sociales que puedes desarrollar durante un curso de idiomas en el extranjero, te brindarán una importante ventaja profesional.
Estudiar en un ambiente exigente pero que te brinda apoyo, te permitirá explorar y ampliar tu “zona de confort”.
Zonas de confort, reales e imaginarias
El concepto de la “zona de confort” ha sido un tema de debate en la investigación pedagógica reciente. De acuerdo con la teoría (ampliamente aceptada en muchas áreas del desarrollo personal), exigirte a ti mismo a probar cosas nuevas te saca de tu “zona de confort” (comfort zone) a una “zona de crecimiento” (growth zone). La experiencia puede ser difícil, pero al enfrentar y superar desafíos, lograrás un crecimiento personal. La próxima vez que te encuentres con un desafío similar, te sentirás menos intimidado y lo podrás afrontar con la confianza que te da la experiencia.
Luckner y Nadler (1997) lo resumen de esta manera:
“Al involucrarse en experiencias que están más allá de la zona de confort, los individuos están obligados a entrar a un área incómoda y extraña – the groan zone (“zona de quejidos”). Al superar estos sentimientos y pensamientos de ansiedad e inseguridad, mientras simultáneamente experimentan el éxito, los individuos salen de la groan zone para entrar a la growth zone.” (pág. 20)
Sin embargo, como lo señala Brown (2008), estar fuera de tu “zona de confort” no es un fin en sí mismo, de hecho es, por definición, una experiencia desconcertante. El potencial de crecimiento personal, solo es posible cuando la experiencia de estar fuera de la zona de confort es apropiada y conduce a un resultado positivo… lo cual es una parte fundamental del aprendizaje de un idioma extranjero.
Por ejemplo, la idea de hacer una presentación en un idioma extranjero, puede ser una pesadilla para muchas personas. Pero esta es justamente una tarea que tendrás que hacer durante un curso de idiomas, en especial en los niveles superiores. Aquí es donde estudiar en el ambiente adecuado hace una gran diferencia: cuando estudias un idioma en inmersión, te obligas constantemente a aprender y obtener mejores resultados.
Una enseñanza de calidad en una escuela de idiomas, combinada con la experiencia de vivir en una cultura diferente, te motivará a probar algo diferente todos los días y por lo tanto, ampliar tus límites personales. Te enfrentarás a desafíos y tendrás que trabajar para superarlos, pero al final, serás recompensado con el éxito. No solo habrás aprendido nuevo vocabulario y gramática, sino que estarás mejor preparado para enfrentar los desafíos del futuro y manejar el estrés.
Igualmente, al estudiar en una escuela de idiomas te beneficiarás de una dinámica positiva de grupo. Todos los miembros del grupo pasan por experiencias similares de salir de su zona de confort y desarrollarán sus propios métodos para lograr su objetivo. El entorno adecuado, garantiza una experiencia placentera y productiva, incluso en momentos difíciles.
Por ejemplo, el período de exámenes puede ser una situación potencialmente estresante. Si estás planeando obtener un certificado oficial de un idioma extranjero, inevitablemente tendrás que presentar un examen. La posibilidad de aprobar o reprobar es una situación estresante: la sensación de ser juzgado y el riesgo de fracasar, pueden servir como un estímulo y un obstáculo en tu proceso de aprendizaje. La experiencia de estudiar y aprender en un ambiente de inmersión total que te brinda apoyo personalizado, te permitirá hacer rápidos progresos lingüísticos y hará que los exámenes sean menos intimidantes. Las habilidades que aprendes fuera de clase, también te ayudarán en el proceso de aprendizaje.
Fuera del aula, aprender un idioma en inmersión te empujará fuera de tu “zona de confort”, pero entre más tiempo estés inmerso en otro idioma y otra cultura, te sentirás más cómodo. Lo que parecía intimidante o extraño al principio, pronto se vuelve algo cotidiano. No es un proceso que suceda en un instante aislado de revelación, sino a través de una acumulación de momentos.
El estrés es una forma de energía ¡y la energía tiene que ser utilizada! El aprendizaje de un idioma en inmersión, te ayudará a convertir los momentos estresantes, en recuerdos y habilidades para toda la vida.
Un curso de idiomas te brinda mucho más que conocimientos lingüísticos
Aprender un idioma nuevo en inmersión, te otorga las habilidades esenciales para la vida moderna: manejo del estrés, concentración y comunicación. Gracias a esta experiencia, crecerás como persona y estarás más preparado para afrontar todo tipo de desafíos. Y además de aumentar tu potencial laboral, aprenderás a entender diferentes culturas sin verlas a través de la perspectiva de tu lengua materna. En ESL, tenemos más de 15 años de experiencia en ayudar a los estudiantes de idiomas a alcanzar sus metas ¡y nos encantaría ayudarte a alcanzar las tuyas!
Fuentes:
Brown, M. (2008). Comfort Zone: Model or metaphor? in Australian Journal of Outdoor Education, 12(1), 3-12.
De Botton, A. (2004). Status Anxiety. London: Hamish Hamilton
Festinger, L. (1957). A theory of cognitive dissonance. Stanford, CA: Stanford University Press.
Luckner, J. L., & Nadler, R. S. (1997). Processing the experience: Strategies to enhance and generalize learning (2nd ed.). Dubuque, IA: Kendall Hunt.
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