Aprender otro idioma te abre nuevos horizontes, es una manera de conocer gente de todo el mundo y te permite viajar a lugares fascinantes. Pero, si has decidido aprender otro idioma, ¡todo eso ya lo sabes!
Sin embargo, lo cosa se pone complicada cuando hay que elegir qué idioma aprender… o por cuál empezar, si nunca has estudiado una lengua extranjera. Ya sea tu primer idioma extranjero o el séptimo, no siempre es fácil saber cuál te conviene más ni por qué decantarse por uno en lugar de otro. Si te está costando decidir con qué idioma ponerte, no te preocupes; hemos preparado una serie de consejos sencillos para ayudarte a tomar una decisión.
Aprende un idioma que sea útil
Puede que su utilidad no sea la razón más emocionante por la que aprender un idioma, ¡pero hay que ser práctico! Ya sea para usarlo en tu vida personal o en la profesional, debe ayudarte a avanzar en la vida. Así, debes tener claro por qué lo quieres aprender.
Es innegable que el inglés es uno de los idiomas clave para prácticamente todo: para viajar, en el trabajo y en la comunicación internacional. Pero, ¿y si quieres aprender algo nuevo?
Desde el punto de vista profesional, el alemán es uno de los idiomas más demandados por las empresas extranjeras y multinacionales. Teniendo en cuenta que la industria alemana es la más potente de la Unión Europea, ¡estudiar alemán es una apuesta segura! Si quieres estudiar una lengua que te aprenda avanzar profesionalmente, averigua qué idiomas se valoran más en el sector que te interese. Por lo general, las multinacionales buscan talento con idiomas como chino, ruso, árabe y, por supuesto, inglés.
Estudia un idioma que te permita explorar el mundo
¿Cuál es la mejor manera (y la más rápida) de descubrir un idioma y una cultura diferentes? ¡Viajando! Además, es una manera estupenda de motivarse a aprender un idioma. Sumergirse en la cultura de otro país y enfrentarse a situaciones nuevas a diario ayudar a acelerar drásticamente el proceso de aprendizaje. Aprender el idioma local te permitirá explorar el país mucho más a fondo e ir más allá de los típicas rutas para turistas.
Piénsalo: ¿cuál quieres que sea tu próximo destino? Visita un país que te emocione, del que a lo mejor no sepas mucho, y descubre cómo son sus habitantes y su cultura a través de una estancia lingüística.
Elige un idioma que te resulte más “fácil”
Estudiar un idioma similar al tuyo o que puedas practicar fácilmente es una idea fantástica si quieres progresar rápidamente y aprenderlo en mucho menos tiempo. Cada uno avanza a su ritmo, pero, si aprendes un idioma relativamente similar a uno que ya dominas, debería resultarte mucho más fácil, sobre todo si es tu primer idioma extranjero.
Si no te interesan demasiado las lenguas que se parecen a la tuya, otra forma de decidir es ver los recursos a los que tienes acceso. ¿Hay hablantes nativos con los que practicar en tu zona? ¿Hay métodos de aprendizaje en línea de calidad? ¿Es un idioma que se pueda practicar a través de aplicaciones móviles o del que se impartan cursos en tu ciudad? Analizar a qué recursos tienes acceso en tu vida cotidiana y en tu entorno puede ayudarte a decidir qué idioma aprender.
Estudia un idioma que te suponga un reto
Por otra parte, hay a quien le gusta aprender un idioma precisamente por el reto que supone. Sin duda, hablar un idioma considerado difícil te hará destacar, ya sea en tu círculo social (si eres de a los que les gusta presumir) o incluso a la hora de solicitar un puesto de trabajo.
Además, un buen desafío puede resultar muy motivador. ¡Imagina lo realizado que te vas a sentir cuando domines un idioma que mucha otra gente ha intentado aprender en vano!
Aprende un idioma que te interese
¿Te fascina el K-pop? ¿Eres un enamorado de los fados? ¿Te apasionan las luces y colores de Bollywood? Si tienes intereses o aficiones que no sean muy conocidos en tu país, la mejor manera de acercarse más a ellos es aprender el idioma. Imagina poder leer tus manga favoritos en japonés o ver los últimos K-dramas sin subtítulos.
El interés hará que aprendas más rápido, ya que querrás conocer la cultura que hay detrás de esa afición. ¡Además, podrás estar en contacto con gente de todo el mundo que comparte tus mismos intereses y tendrás la posibilidad de viajar para seguir aprendiendo in situ!
En cuanto averigües qué te motiva a aprender un idioma, lo verás mucho más claro. Si de verdad no eres capaz de decidir qué idioma quieres estudiar, trata de priorizar alguno y haz una pequeña lista… ¡nadie ha dicho que solo puedas aprender un idioma extranjero en tu vida! Cuando logres dominar uno, pasa al siguiente. Si ya has tomado una decisión, ¡toca ponerse manos a la obra y empezar a estudiar! ¿Por qué no te lanzas de lleno a través de un curso de idiomas en el extranjero? ¡Así, podrás aprenderlo en total inmersión lingüística!
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